Lo que necesitas es Amor.

Con esta nueva edición del pseudo-programa "Gran Hermano", que no es más que un peligroso experimento social, para deleite de los voyeurs televisivos, se ha alcanzado un hito más en el (ya bastante alto) umbral del morbo. En un inicio, GH proporcionaba a su audencia, ávida de escándalos y cotilleos, concursantes (ellas) que habían sido prostitutas. "¿Y qué?", se preguntaran las mentes abiertas. Pues que en este país, eso da morbo. Después vinieron legionarias zoofílicas, pastores psicóticos y un largo etc. hasta llegar al producto de mayor éxito: Niky y su sexualidad, en un afán desesperado por ofrecer algo más en cada edición. Los índices de aundiencia merecen despojar de dignidad a personas y colectivos sin ningún reparo.
Hoy, el nuevo fichaje se llama Amor. Una mujer atrapada en el cuerpo de un hombre. Una mujer que, además, a mi me parece atractiva. Quizás le pierde la testosterona, y por eso es tan generosa en mimos, caricias y zalamerías con todo lo que lleva pantalones dentro de la casa. Pero, aparte de eso (que por otro lado es perfectamente lícito, sea una mujer, un hombre o un koala), el morbo que vende la insoportable y endiosada Mercedes Milà es ¿qué pasará cuando uno de los chicos se de cuenta de que Amor tiene mucho más amor del que espera? Pues bien; la respuesta debería ser: NADA. Porque no nos cansamos de decir lo bonito que es el amor (con minúsculas), y lo bella que es la poesía, pero en realidad nos enamoramos tanto del cuerpo como de la persona. La prueba está en que, si fuésemos una sociedad moderna (que no lo somos), Amor le diría al pipiolo de turno "soy una mujer, pero me falta el último paso para ser completa" y él le respondería "Tranquila, yo te quiero como eres, y te ayudaré en lo que pueda". ¡JA! No nos engañemos. Es posible que si ella le dice eso a él, éste reaccione mal, muy mal o que incluso le de una paliza (¿violencia de género? ¿de qué género?) O no, quizás me equivoque... Ya se verá.
En cualquier caso, Tele 5 estará ahí para enfatizar o encubrir los hechos, según sus intereses. Porque las personas les importan un bledo. ¡¡Dios mío, no ceso de preguntarme que nos deparará "GH X"!!
Lo único realmente positivo que hemos sacado algunos de todo esto, es que este parada de los monstruos en que convierte Tele5 todo lo que toca, ha servido para que un amigo nuestro, Carles, alentado por la historia de Amor, reconozca también que él está atrapado en el cuerpo de un hombre, un cuerpo muy grande, pero que en realidad él también se siente mujer. Una mujer muy fea, pero no menos mujer por ello.
¡Ánimo Carles, ve a GH! Y garantízate el éxito afirmando que tú sólo mantienes relaciones sexuales con el porexpán!
¡LA AUDIENCIA LO NECESITA!
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